domingo, 8 de diciembre de 2013

MARLA JACARILLA, ¿escritora o artista?

Marla Jacarilla provoca empatía. Eso es lo que salí pensando la primera y, de momento, única vez que la vi. Su trato hacia aquel que la escucha derriba las barreras del artista concebido como Genio situado en el Panteón divino. Ella es sencilla como sencillo es su arte. Y seguramente aquí es donde reside la capacidad que tiene para poder mantener una conexión simbiótica con quien contempla y descubre su obra, aquel que la recibe.

En un mundo que navega entre el Net.art, el vídeo, la instalación, la performance o la fotografía, Marla tiene la capacidad de reunirlo todo y aplicar la vía artística sobre la literatura. No es una división entre los dos. No es una escisión. Tampoco es una forma de mostrar las diferencias. Es un intersticio. La artista se sitúa en un lugar particular creado por ella misma donde arte y literatura se fusionan, donde ella se ve capacitada para pasear y para dar lugar a su creación.

A partir del objeto literario, Marla engendra el objeto artístico. Es decir, el objeto literario es concebido de forma artística hasta que las dos materias se fusionan. Y todo con un propósito: presentar realidades. La idea que unifica la obra de la artista es intentar que aquel que experimenta o contempla sus creaciones, aquel que las absorbe o que es absorbido por ellas, despierte de un mundo donde le han colocado para pensar que únicamente existe una realidad posible. Lo que hace Marla es mostrar que hay otras formas de concebir las cosas, que la literatura está llena de matices gracias a la riqueza de la lengua y al ingenio del autor, un ejecutante que dice más de lo que puede llegar a saber.

Estos diferentes niveles de interpretación de un mismo concepto literario surgen a partir de la experimentación. Sabiendo que el fracaso es una posibilidad y aceptando éste como parte del proceso artístico, Marla inicia un camino desde un texto y da como resultado múltiples opciones, en función de la naturaleza del objeto artístico. Es capaz de deformar el texto primigenio, rehacerlo, destruirlo, convertirlo en imagen, llevarlo a su ejecución o trabajarlo hasta darse cuenta de que está errando en el intento.

A lo largo de toda su obra encontramos una constante: subjetivismo. Si al principio decíamos que Marla provoca empatía es precisamente por su libertad a la hora de entrar y salir del texto cuando le place y de la forma en que le place. Seria hipócrita pensar que pueden existir diferentes realidades si el propio sujeto no experimenta una de ellas. Pero no comete este error. Su obra artística nace de la experiencia, del trato con los textos, del recuerdo amable o hiriente que éstos generaron. Reproduce sensaciones desde su “yo” que otros que reciben su obra también han podido sentir con esos mismos textos sobre los que ella trabaja. Es por esto que conecta, porque establece un discurso de tú a tú, de igual a igual, en el que acepta al sujeto del otro sin olvidar el suyo propio. Este discurso subjetivo explota en las creaciones donde ella misma narra los textos que crea.

Para entender más a qué nos referimos con el “sujeto Marla”, podemos dividir sus obras en dos grupos. Podríamos escoger cualquiera de su amplia creación pero estas que ahora pasamos a describir son las que más se adaptan para comprender las dos vías que sigue. Estos dos grupos se dividen entre las obras que ella crea a partir de otros sujetos y las obras donde son los otros los que pueden dar forma a lo que ella propone.

Por tanto, del primer grupo, de esas donde se sirve de otro sujeto, podemos destacar Si sólo son libros y 101 retratos al azar de algunos usuarios del subsuelo. En la primera obra, Marla interpreta diferentes fragmentos de libros que han sido importantes para ella a lo largo de su vida. Esto da lugar a fotografías, ilustraciones o dibujos en base a lo que se explica. La segunda obra tiene más relación con el sujeto humano, donde ella crea 101 historias que imaginó a partir de personas que vio en el metro. Es en este primer grupo donde la artista, como sujeto, se deja influir por su propia experiencia y crea un objeto artístico que podrá conectar fácilmente con el que lo recibe. Cualquiera se puede sentir identificado con el libro que ella interpreta o con la vida narrada de otro.

Del segundo grupo, de aquellas obras donde es el otro el que decide sobre la idea de Marla, encontramos Las bifurcaciones electivas. A través de vídeos, el receptor puede recorrer, de forma fragmentada, la biografía de un personaje inventado. Es él quien decide la experiencia, quien decide el rumbo que toma la historia, relacionándose al mismo tiempo con diversas obras y escritores. La obra lleva, pues, a la reflexión sobre la creación literaria y la forma de composición de los autores.


Entonces: ¿escritora o artista? Sería complicado encuadrar a Marla Jacarilla en uno de estos dos universos. Y, de hecho, no lo haré. Porque a partir de su obra es capaz de demostrar que la literatura y el arte pueden unirse. La fragmentación, el hipertexto, la libre interpretación, la creación desde cero o la recreación son unas constantes que Marla utiliza a lo largo de su obra. No es cuestión de pincel o lápiz, lienzo o folio de papel. Es la posibilidad que tiene la artista actual de tomar un concepto y llevarlo a la práctica, trabajarlo hasta llegar a la creación artística como no se había hecho todavía. Y esto de tú a tú, sin que ningún Genio ocupe el intersticio donde el receptor es invitado por Marla para vivir una experiencia y descubrir otra realidad. 

Charlie W.


Aquí os dejo un enlace a la web de Marla donde podréis descubrir gran parte de su obra.

domingo, 1 de diciembre de 2013

La lucha artística contra el VIH

Desde el año 1988, la sociedad mundial conmemora, cada 1 de diciembre, la lucha contra el VIH. Este es el virus de inmunodeficiencia humana, una infección transmitida de forma sexual, sanguínea o perinatal que afecta directamente a las células del organismo, provocando que éste no pueda defenderse de otras infecciones oportunistas que le debiliten hasta la muerte. En la actualidad, existen fármacos para apaciguar la fuerza del VIH y evitar su etapa crítica, el SIDA (Síndrome de inmunodeficiencia adquirida), pero sólo desde el año en que se inició la conmemoración de este día, el VIH ya se ha llevado a más de 25 millones de personas en todo el mundo. Y debo recordar que eran hombres y mujeres, heterosexuales, homosexuales y transexuales, blancos y negros, creyentes y ateos, sin excepción. Es una enfermedad que puede llegar a todos.

Artistas de alrededor del mundo han dedicado su obra, o parte de ella, a representar su relación con el VIH. Desde su rápida expansión en los años 80, el arte contemporáneo ha abierto sus puertas sin miedo a dejar que los artistas hablaran de una realidad hiriente. Lo que pretendo a continuación es mostrar algunos de los artistas que más han trabajado sobre este tema, viendo como una realidad particular afecta directamente a toda la sociedad. No se puede apartar la mirada de todos aquellos que a diario luchan por no morir y el arte siempre está ahí para contar su historia.

Untitled (Portrait of Ross in L.A.)
Félix González-Torres
Uno de los hombres que más ha tratado este tema es Félix González-Torres, artista nacido en Cuba, criado en Puerto Rico y experimentado en Nueva York. Se encargó de crear una dualidad entre lo individual y lo colectivo, haciendo ver a la sociedad que sus propios problemas afectaban también a los espectadores. Toma como objeto artístico lo cotidiano y el producto manufacturado, aquello que la población tiene en su casa para mostrar una dura realidad. Con algo tan simple como una pila de caramelos, González-Torres consigue que el público pueda llegar a sentir una minúscula parte de su dolor. Estoy hablando de Untitled (Portrait of Ross in L.A.). Abatido por la muerte de Ross -su pareja- a causa del VIH, el artista coloca en una sala una cantidad de caramelos que pesan exactamente lo mismo que Ross. Los visitantes pueden escoger llevarse uno de estos hasta que el montón desaparece. Entonces se vuelve a reponer. Con qué facilidad nos habla González-Torres de compartir el dolor al mismo tiempo que sigue persistiendo, que cuando parece que desaparece vuelve. Inevitablemente también está advirtiendo, a mi forma de entender, la facilidad con la que el VIH se expande. Considero que es una llamada de atención, una advertencia a la precaución y al control sobre la enfermedad. 


Untitled
Keith Haring
Keith Haring es otro de los artistas que más ampliamente trató el tema que nos ocupa, debido a que él mismo murió a causa del VIH. Fue uno de los primeros en romper la barrera de los museos e ir directamente a la calle, a reivindicar sobre los muros, con el graffiti, la realidad de la sociedad que le envolvía. Como Félix González-Torres, Haring pretendía expandir su arte ligado a su enfermedad para que la población fuera consciente, para que los jóvenes pararan un momento a reflexionar y pudieran evitar el contagio. Su arte, popularizado en los muros y metros de Nueva York ha llegado al punto de diseminarse entre la sociedad a través de la ropa, los objetos de papelería o las campañas publicitarias. Cualquiera puede tener un Haring en su casa y ni siquiera se da cuenta de ello. El aviso que el artista quería dar se ha difuminado a causa del consumismo pero, gracias a él, otros artistas actuales continúan su estela para que los afectados por el VIH no caigan en el olvido.


Otra de las artistas que más abiertamente ha tratado este tema es Nan Goldin que, a pesar de no vivir la enfermedad en ella, ha visto como muchos de sus amigos han caído. Y es por ello que decide trabajar artísticamente y a través de la fotografía sobre el VIH, por evitar el olvido de aquellos a los que ha querido y se han ido, por abrir al mundo una realidad que no debe esconderse, porque el SIDA es un problema de todos. Uno de sus más impactantes trabajos es la serie de 15 fotografías que realizó a su amiga y actriz Cookie Mueller entre 1976 y 1989. A lo largo de las imágenes puede verse como la enfermedad va afectando a Cookie, además de la muerte de sus amigos y de su propio marido, hasta desembocar en la protagonista en el ataúd. No es amarillismo, es realidad. Es un testigo del dolor que un afectado por el VIH debe cargar a lo largo de su vida. Y es la posición de Nan Goldin como amiga, como persona que supo el lugar que debía ocupar, como acompañante de Cookie y como refuerzo de su dolor.


Cookie Mueller's Portfolio
Nan Goldin


Carrying
Pepe Espaliú
Por último, y no por ello menos importante, podemos acercarnos hasta nuestro país, que también ha sufrido el peso del VIH. Pepe Espaliú fue uno de los que decidió romper el silencio y hablar directamente, en un país de bocas calladas y dedos acusadores, de una realidad que no podía esconderse más. Espaliú sabía que el miedo era el dictador de España y debía hacer algo por poner fin a ese analfabetismo que imperaba en el pueblo. En el 1992, un año antes de su muerte, organizó una potente acción en Madrid llamada Carrying. Él mismo se pasearían por la ciudad, portado por una pareja desde las Cortes hasta el Reina Sofía, descalzo. Durante el recorrido, los portadores irían cambiando pero él nunca tocaría el suelo. Al llegar ante el Centro de Arte Contemporáneo, antiguo hospital de tuberculosos, las puertas estarían cerradas y el propio Espaliú las abriría de una patada. Se abrirían así las puertas a la información, se abrirían las bocas de todos los afectados por el VIH para dejar atrás los tabús de una España que debía avanzar. 



Así pues, hemos visto a cuatro artistas que trataron directamente y sin miedo el VIH. Podrían haber sido otros cuatro o dedicarnos a uno o hacer una larga lista de nombres y obras. Da igual. La cuestión es utilizar el arte como forma de expresión. Si hoy recojo aquí a estos artistas es por hablar de la realidad del VIH, son una excusa, un pretexto. Con cada artículo pretendo presentar verdades del arte pero lo que ahora intento es que tú abras los ojos y la boca, que no entiendas el VIH como un problema ajeno. Esto es por todos los que han caído y por todos los que siguen luchando. Va más allá de Haring o Espaliú. Va a la sociedad en la que vivimos, al mundo y el lugar que ocupamos en él. Que nos domine la razón y el sentimiento y que nunca permitamos que lo que otros quisieron acallar se interponga como una piedra en el camino. Hoy va por ellos, ese ellos que somos nosotros.

Charlie W.

Aquí os dejo algunos enlaces de asociaciones de lucha contra el VIH, información sobre la enfermedad y lugares donde hacerse la prueba: